Uno de los aspectos que la Medicina China considera de vital importancia a la hora de entender el estado energético de una mujer es la menstruación.

Cuando realizamos una entrevista con una mujer, dedicamos un buen rato a preguntarle sobre su menstruación. Nos interesa saber la regularidad, el color, la textura, la cantidad, la duración, así como si hay presencia de coágulos o dolores antes, durante o después de la menstruación, etc.

A partir de esta información y de otras observaciones, podemos establecer cuál es el patrón de desarmonía de la mujer.

En occidente no prestamos mucha atención cuando una menstruación es escasa, abundante, si es de color marrón, granate o pálido, si es mucosa, terrosa o demasiado líquida, si dura más / menos de 4 o 5 días, etc.

En cambio, para la Medicina China cada una de estas características es algo importante que hay que valorar y regular pues es indicativo de que algo no está funcionando correctamente a nivel interno y/o a nivel emocional.

La Medicina China establece que una menstruación normal y saludable tiene las siguientes características:

• Regular: cada 28-30 días.
• Duración: de 4-6 días.

• Color: rojo fresco y vivo, desde el principio hasta el final de la menstruación.
• Textura: fluida, sin que sea del todo líquida.

• Cantidad: entre 30 y 80 ml.
Según la Medicina China, cualquier otra característica diferente a estas, es indicativo de un funcionamiento menstrual anormal que hay que regular.

Por mucho que nos sorprenda, la menstruación no debería generar:
• Síndrome premenstrual: tensión emocional y muscular, altibajos anímicos, hipersensibilidad, hinchazón (corporal, de abdomen o de senos), trastornos digestivos, dolor de riñones, piernas pesadas, agotamiento.

• Dolores de cabeza antes, durante o después de haber tenido la menstruación.

• Ausencias de la menstruación.
• Infertilidad.

• Menstruaciones muy abundantes o muy escasas.
• Dolor en el abdomen, antes, durante o después de la menstruación, ni tampoco durante la ovulación.

• Pérdidas de sangre después o antes de la menstruación.
Para la mayoría de mujeres, muchas de estas características son habituales e incluso normales en ellas cuando en realidad no debería ser así.

Mejorando la calidad de la menstruación es muy probable que otros aspectos internos o emocionales también mejoren. Un claro ejemplo es que muchas mujeres, cuando regulan su menstruación, pueden quedarse embarazadas, o dejan de sufrir migrañas, insomnio, ansiedad, trastornos digestivos, etc.

La Medicina China cuenta con una gran experiencia a la hora de regular las menstruaciones y las molestias asociadas y lo hace con técnicas naturales como la acupuntura, la fitoterapia, el masaje, la alimentación y la gestión emocional.

Todas estas técnicas ayudan al cuerpo a regular el sistema hormonal, la temperatura basal, regula la energía de los órganos implicados en la menstruación, activa la circulación de la sangre de la zona ginecológica y, muy importante, serena el estado mental y anímico, lo que permite que nuestro cuerpo esté más relajado y pueda realizar sus funciones de una manera más fluida y normal.

Proyecto NUR. Menstruación, Salud.