Alimentos para el verano
El inicio de la estación se produce el día 21 de junio con el solsticio de verano. Con el sol llega el calor y nos sentimos más vitales, con tendencia por las actividades de ocio al aire libre.
El sol es uno de los 4 elementos de la naturaleza indispensables para la vida. La luz del sol mejora el estado de ánimo, nos hace despertar después del largo invierno y nos ayuda a olvidar el estrés y la apatía, y nos proporciona energía.
También nos aporta otros muchos efectos beneficiosos: Favorece la circulación general, al calentar la piel. Estimula la síntesis de vitamina D, imprescindible para una buena absorción del Calcio. Mejora ciertas patologías de la piel.
Tiene un efecto tonificante en los músculos. Mejora el sistema inmunitario…
Por tanto no nos conviene evitarlo. Pero es importante tener unas precauciones mínimas para tomarlo: utilizar el fotoprotector adecuado, no tomar el sol entre las 12 y las 16 horas (aunque esté nublado), e hidratarse bien.