Diez plantas de interior que limpian el aire

Diez plantas de interior que limpian el aire

Las plantas son parte fundamental en la vida porque nos dan el oxígeno que necesitamos para sobrevivir. Pero desgraciadamente el tamaño de las casas de hoy, el agitado ritmo de trabajo o la falta de tiempo, nos obligan a vivir sin este elemento tan benéfico a la salud y a al mismo tiempo decorativo, y en ocasiones cuando sí las tenemos se mueren por la falta de cuidados adecuados.

En 1989, la NASA hizo una lista con las plantas que mejor funcionan para los espacios cerrados, aquellas que limpian el aire: filtran los gases tóxicos y producen oxígeno y por lo tanto ayudan a hacer más “habitable” cualquier sitio.

Además son fáciles de mantener porque las malas condiciones no les afectan, por el contrario, son capaces de vivir en sitios donde no llega mucha luz y el aire no es tan limpio, por la cantidad de CO2 que emiten las personas que lo habitan.

El estudio para hacer la lista se basa en la interacción del hombre con el entorno: miden la cantidad de oxígeno que emiten las plantas versus el dióxido de carbono que exhalamos nosotros y los diferentes químicos que podría haber en el ambiente: benceno, un solvente común en los hogares, tricloroetileno y formaldehídos.

Las plantas examinadas

Estas plantas fueron las que reaccionaron mejor a las pruebas de los científicos de la NASA. Pueden estar en ambientes hostiles, si es que se riegan dos veces al día.

Palma de bambú (Chamaedorea seifrizzi):debe ponerse a la sombra o semi sombra, soporta bajas temperaturas y requiere humedad ambiental para que no se le sequen las puntas. Si está en ambiente seco, hay que vigilar las plagas de araña roja que la atacan.

Ficus o Laurel de la India (Ficus benjamina): necesita mucha luz, pero nunca exponerlo directo al sol, no necesita humedad ambiental, sólo rociar sus hojas con agua cuando lo riegues. La temperatura ideal es tenerlo mínimo a 13°C en invierno y en verano, máximo a 24°C. Se riega una vez cada ocho día en invierno y sólo dos veces por semana en verano.

Yerbera (Gerbera jamesonii): es indiferente a la cantidad de luz que le llegue, claro que mientras más exposición, más flores. Desde estar en un ambiente con mucha humedad, entre 75 y 90% y soporta máximo 25°C.

Hiedra (Herdera helix): es una planta trepadora que crece rápido, por eso hay que tener cuidado y evitar que aumente mucho su tamaño porque empezará a invadir toda la habitación. No hay que regarlas en exceso y necesitan un ambiente con temperatura entre 12°C y 20°C.

Crisantemo o Pomas o Margaritas de floristería (Chrysanthemus moriflolium): debe estar en un lugar claro y muy ventilado, no resiste mucho las estaciones calurosas o la luz en exceso. Siempre debe estar húmeda, porque las flores se marchitan de inmediato cuando les falta agua.

Lengua de Suegra (Sansevieria trifasciata):debe evitar el riego en exceso, deben estar con luz buena, pero no directa y tampoco a la sombra. La temperatura no puede bajar de los 10°C y viven en ambiente seco.

Espatifilo o Calilla o Anturio Blanco o Cala Blanca (Spathiphyllum sp.): florecen en verano, necesita riego frecuente y rociado de las hojas. Son de mucha luz, pero sin que lleguen directamente los rayos del sol.

Dracaena Janet Craig (Dracaena deremensis): se riega cada 15 días, en el período de crecimiento. No aguanta el exceso de sequedad ni el exceso de agua. Debe estar a semi sombra y la temperatura ambiente no debe bajar de los 10°C.

Dracaena Warneckii (Dracaena deremensis): es de clima cálido, la temperatura debe estar siempre entre los 15°C y los 26°C. Necesita un ambiente húmedo constante, pero sin estancamiento de gua. Durante el invierno se riega sólo para no secar la tierra.

Dracaena Marginata (Dracaena marginata):no debe estar expuesta al sol directo, necesita humedad elevada y hay que cambiarla de maceta cada dos años.

«La misión más elevada de las plantas no es meramente agradar a nuestros ojos con el color, a nuestras bocas con frutos deliciosos.

No sólo hacen esto y más, sino que también están consumiendo silenciosamente, pero sin lugar a dudas, lo que es impuro y nos es perjudicial en la atmósfera y en la tierra de nuestros hogares; y cualquier morada en la que las plantas estén bien cultivadas y sanas será más probable que sea una casa limpia y saludable que si las plantas no estuvieran allí.»

(atribuido al Ladie’s Floral Gabinet, siglo XIX)