El colágeno es el principal componente del tejido conectivo fibroso, que se encuentra en los huesos, la piel y las articulaciones. Es una proteína clave que garantiza la cohesión, la elasticidad y la regeneración de la piel, del cartílago y de los huesos.
Es una molécula de gran tamaño y para que pueda ser absorbida por el organismo, es necesario romperla mediante un proceso de hidrólisis en partes más pequeñas: los péptidos de colágeno.
Tanto el origen de la proteína de colágeno de partida, como el proceso de hidrólisis, son cruciales para obtener un colágeno activo de la máxima calidad y funcionalidad.
El Colágeno y la piel.
El colágeno es el componente fundamental de la dermis y responsable de la tonicidad y resistencia de la piel. Es sintetizado por las células de la piel conocidas como fibroblastos.
A partir de los 25 años los fibroblastos disminuyen la producción de colágeno, y es a partir de los 40 años cuando la disminución es mucho más marcada, volviéndose la piel más fina, seca y flácida, y acompañandose de la aparición de surcos y arrugas.
El Colágeno y los huesos.
En la función ósea sana, existe una constante regeneración de tejido, lo que garantiza que el ueso siga manteniéndose fuerte. La osteopenia (pérdida de masa ósea) aparece cuando se produce un desequilibrio entre el desgaste y la formación ósea normal, lo que resulta en una masa ósea escasa y una pérdida de tejido.
El Colágeno y las articulaciones.
El cartílago esta constituido por un único tipo celular, los condrocitos, embebidos en una matirz compuesta por dos componentes principales: colágeno, que otorga resistencia a la tracción, y agrecán, que ayuda a resistir las fuerzas de compresión.
Una síntesis y renovación adecuada mantienen íntegra la salud del cartílago. Durante la artritis, esta regulación es alterada por la expresión de moléculas inflamatorias que estimulan la síntesis de enzimas que degradan la matriz. El resultado es una pérdida de cartílgo y de funcionalidad de la articulación.
El Colágeno y el deporte.
La práctica de actividad física intensa es uno de los principales motivos del desgaste y deterioro de nuestro colágeno y de los tejidos de nuestro cuerpo conformados por esta proteína: las articulaciones, los huesos y el tejido conectivo que envuelve los músculos.
El Colágeno Marino proporciona péptidos de colágeno para que nuestras células puedan regenerarlo, previniedo así lesiones por el deterioro y frenando las molestias ocasionadas.
Además, el Colágeno Marino está constituido por un 20% de Glicina y un 8% de Arginina, aminoácidos que contribuyen al rendimiento deportivo y favorecen la síntesis de Creatina para restaurar la masa muscular después del ejercicio.
Más información www.casapia.com
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