Biberones de plástico y otros envases: tóxicos por Bisfenol A

El material para la fabricación de envases de biberones y alimentos ha sido muchas veces cuestionada por algunos efectos que podrían tener en la salud.

Los plásticos que habitualmente utilizamos en biberones , agua embotellada, fiambreras o tupper, recipientes de plástico para los alimentos, pueden desprender al alimento pequeñas dosis de compuestos químicos como el bisfenol A, ftalatos o amonio, tóxicos para la salud incluso en dosis muy bajas.

El número indicado en la etiqueta de reciclaje indica su composición y por él podemos saber su toxicidad.

En algunos países de Europa han prohibido la venta de biberones que puedan generar esta sustancia altamente tóxica, sin embargo las empresas multinacionales que laboran con este material se han encargado de rebatir los estudios y contrademandas existentes.

Según investigaciones el Bisfenol A es un componente sintético que puede tener los mismos efectos que las hormonas en el cuerpo.Estos cambios celulares afectan al equilibrio de los tejidos y producir algunos tipos de cáncer al alterar el sistema endocrino.

En 2009, Canadá ya fue la primera nación que prohibió la utilización de esta sustancia en la fabricación de biberones, una medida que después tomarían países como Francia o Dinamarca.

¿Qué es el Bisfenol A?

Es un producto químico que se usa en la fabricación de un tipo de plástico llamado policarbonato . También se utiliza en el recubrimiento interno de casi todas las latas de alimentos y bebidas, entre ellas las latas de fórmula para bebés.

¿Por qué se usa Bisfenol A en envases de alimentos y bebidas?

Como es fuerte, liviano y duradero, los revestimientos hechos con Bisfenol A , evitan que latas de comida y bebida se oxiden, y esto permite que duren más tiempo.

¿Dónde se encuentra el Bisfenol A?
Se encuentra en la fabricación de envases de alimentos reciclables, como recipientes y botellas de plástico, biberones y vajilla de pástico, y se utiliza también como recubrimiento del interior de latas de comida para que no se oxiden, en los conocidos tupper o recipientes de plástico para los alimentos, etc.

¿Como afecta a la salud el uso de estos plásticos?
La toxicidad de estos plásticos y riesgo del bisfenol A se encuadra en la categoría de los denominados estrógenos artificiales y está asociado a su potencial de interactuar con el sistema hormonal actuando como un disruptor endocrino que mimetizan la acción de los estrógenos naturales interfiriendo en la acción del ciclo hormonal natural.

Es por ello por lo que puede afectar a la fertilidad y la reproducción provocando anormalidades de desarrollo y reproductivas como infertilidad, defectos de nacimiento y muertes fetales y neonatales, así como varios tipos de cáncer, de mama, próstata, testículos, útero, alteraciones en el sistema nervioso, en las neuronas, en las mamas (propensión al cáncer), esterilidad, diabetes o dolencias cardiacas, etc…

Investigadores alemanes han puesto de manifiesto la presencia de altas dosis de bisfenol A en sangre y cordón umbilical de mujeres embarazadas y han correlacionado su presencia con la aparición de anormalidades en fetos y recién nacidos

Aún en dosis muy bajas provoca estos efectos perjudiciales, ya que se acumulan en el cuerpo con el consumo habitual, generalizado y continuado durante años.

¿Cómo pueden estar expuestos al Bisfenol A los bebés?
Los bebés pueden estar expuestos de tres maneras:

  *  Una pequeña cantidad de Bisfenol A puede pasar del revestimiento de la lata hacia la fórmula y luego ser consumido por el niño.
  * También puede pasar a la fórmula o la leche del niño a través de ciertos tipos de biberones plásticos cuando se los llena con agua caliente.
  * Durante el embarazo, las madres se lo pueden pasar a sus bebés. Esto puede ocurrir si la madre ingiere Bisfenol A que ha entrado en su comida o bebida a través de recipientes plásticos o latas.

¿Cómo saber de qué plásticos contienen bisfenol A, ftalatos o amonio?

Las botellas o recipientes de plástico homologados llevan una etiqueta de reciclaje en cuyo interior figura un número que indica el tipo de composición del plástico utilizado.

Existen más de 100 tipos de plásticos pero principalmente se utilizan los 7 indicados.

Los plásticos en los que en la etiqueta de reciclado figure un “1″ (polietileno de tereftalato/PET ó PETE) se deben utilizar una sola vez. No se pueden reutilizar.
En los que figura un 2, 4 ó 5 son los más seguros.
Las marcadas con el número “3″ (chloride/PVC polivinilo) pueden también desprender BPA y ftalatos.

Si figura el número “6″ (poliestireno/PS) hay que tener precaución ya que el estireno es un producto químico potencialmente tóxico que se libera cuando el recipiente de plástico se usa para guardar o calentar alimentos o líquidos a temperaturas mayores de 80°C.

Si figura el número “7″, se deben evitar totalmente, ya que desprenden Bisfenol A (BPA) en el contenido del recipiente.

¿Qué materiales serían más seguros?

Es importante evitar el uso de biberones de plástico en los bebes y más aún calentar el contenido en ellos. Lo mejor es sustituirlos por los biberones de cristal que actualmente se comercializan y que disponen de un protector externo que evita cualquier tipo de rotura.

Botellas de bebidas y recipientes de cristal, o de acero inoxidable, son también prácticamente reciclables al 100% y casi tan ligeras como las de plástico. Están libres de productos químicos como el Bisfenol A (BPA), y son seguras de utilizar con los líquidos calientes.

Experimentos con animales expuestos a muy bajas dosis han demostrado serios problemas para la salud como:

 * Cáncer de próstata y pecho.
 * Temprano comienzo de la pubertad.
 * Obesidad.
 * Hiperactividad.
 * Bajo nivel de esperma.
 * Aborto.
 * Diabetes.
 * Alteraciones en el sistema inmune.

Es muy lamentable que existan tantos materiales tóxicos y no haya regulaciones para los mismos. Especialmente cuando se trata de proteger a seres más sensibles o con menos defensas como los bebés y niños.