Vegetarianismo en niños

Vegetarianismo en niños

Cada vez más familias se suman a la alimentación vegetariana y los niños no son la excepción.

Ya sea para estar en sintonía con el medio ambiente o bien para  lograr una nutrición más equilibrada, la tendencia aumenta a medida que la información está al alcance de la mano.

Los especialistas en nutrición infantil, aseguran que las dietas vegetarianas, lacto-vegetarianas (las que incluyen la leche) y ovo-lacto-vegetarianas (las que permiten la leche y el huevo además de los vegetales) cubren las necesidades de bebés, niños más mayores y adolescentes y promueven un crecimiento normal siempre que estén bien diseñadas.

La opción más recomendable para niños es la que incluye la mayor variedad de alimentos.

Los resultados de algunos estudios en los que se comparó la dieta de niños vegetarianos con la de niños no vegetarianos (omnívoros), concluyen que una dieta ovo lacto vegetariana proporciona un desarrollo y crecimiento físico adecuado, como con cualquier otro tipo de dieta.

¿ Qué ventajas podemos obtener de esta dieta ?

– Provee más alimentos naturales, frescos y crudos, ricos en nutrientes y antioxidantes, y menos productos nocivos para la salud como las proteínas animales, grasas saturadas, ácido úrico, azúcar, sodio y harinas refinadas.

– Proporciona gran cantidad de antioxidantes, que previenen el deterioro de las células .

– Suministra gran cantidad de fibra, que beneficia el movimiento intestinal y previene el estreñimiento.

– Ocasiona menores índices de obesidad, diabetes, hipertensión arterial y cáncer.

Otros datos :

La población vegetariana acostumbra a incluir en su dieta, con más frecuencia y en mayor cantidad, frutas y frutos secos.

El incremento del consumo de frutas favorece la mayor ingesta de fibra y vitaminas hidrosolubles, mientras que el incremento en el consumo de frutos secos (nueces, avellanas, almendras…) aumenta el aporte de grasas poliinsaturadas, proteínas de origen vegetal y fibra.

El consumo habitual de frutos secos ha sido considerado por numerosos estudios como un posible agente protector frente a enfermedades cardiovasculares.

Además, entre la población vegetariana, puede destacarse un mayor consumo de antioxidantes (flavonoides, vitamina E, vitamina C, carotenos…), que se encuentran principalmente entre los alimentos vegetales.

Éstos serían, a grandes rasgos, los caracteres nutricionales más favorables de la propuesta alimentaria vegetariana.