dieta1Las mujeres embarazadas que siguen una dieta rica en verduras, fruta , cereales y que beben agua con regularidad tiene un menor riesgo de parto prematuro.

 Y, aunque los resultados obtenidos por los autores de este trabajo que se publica en «British Medical Journal» no pueden establecer la relación causa-efecto, subrayan la relevancia que tiene el consejo dietético en las mujeres embarazadas.

Las evidencias muestran que los hábitos alimenticios maternos pueden afectar directamente al feto; por ello, un equipo de investigadores escandinavos decidió examinar si existe una relación entre la dieta materna y el parto prematuro.

Los expertos emplearon los datos del Norwegian Mother and Child Cohort Study, que incluía información sobre los nacimientos prematuros de 66.000 mujeres entre 2002 y 2008.

dieta2Para ser incluidas, las participantes no tenían que padecer diabetes y haber dado a luz a un único hijo; además, completaron un cuestionario sobre sus hábitos alimenticios durante sus cuatro o cinco primeros meses de embarazo.

 Los investigadores tuvieron en cuenta los factores que podían haber afectado a los resultados (factores de confusión): edad de la madre , antecedentes de parto prematuro y nivel educativo.

El parto prematuro se define como el nacimiento entre la semana 22 y 37.

Tres patrones dietéticos

Los investigadores, coordinados por Linda Englund-Ögge y Bo Jacobsson, del Hospital Universitario Sahlgrenska, en Suecia, 
 identificaron tres patrones dietéticos distintos y los clasificaron en: patrón «prudente» -verduras, frutas, aceites, agua como bebida, cereales integrales, pollo y pan rico en fibra-; «occidental» -aperitivos salados y dulces, pan blanco, postres y productos cárnicos procesados, y «tradicional» -patatas , pescado, salsa de carne, verduras cocidas, leche baja en grasa-.

dieta

Los resultados mostraron que se produjeron 3.505 (5,3%) casos de parto prematuro en las 66.000 mujeres embarazadas. Después de ajustar por los factores de confusión, el equipo encontró que un patrón de dieta «prudente» se asociaba con una reducción significativa del riesgo de parto prematuro, especialmente entre aquellas mujeres que tienen su primer bebé, pero también de parto espontáneo y tardío.

También encontraron los investigadores una reducción significativa en el riesgo de parto prematuro en aquellas que siguieron el patrón de dieta «tradicional». Sin embargo, el patrón de dieta «occidental» no se asoció de forma independiente con el parto pretérmino.

Para los autores del artículo, los resultados muestran que más importante que excluir totalmente de la dieta los alimentos procesados, la comida rápida y/o basura durante le gestación se debería promover un aumento en el consumo de alimentos asociados con un patrón de dieta «prudente».

Fuente abc.es