Detoxificarse es deshacerse de lo que nos hace daño para disfrutar de un estado pleno de bienestar ; ganar energía y belleza. El organismo manda una serie de señales cuando el nivel de toxinas es elevado. Estas señales son dolores de cabeza, digestiones pesadas, estreñimiento, acné, catarros frecuentes, alergias, dolor articular o insomnio.

det

Los cambios de estación son un momento clave realizar una detoxificación pero puedes adelantarla si no notas los síntomas de exceso de toxinas o después de temporadas en las que se descuida la alimentación, como vacaciones de verano o navidad.

Todas las personas, aunque estén sanas, necesitan eliminar las toxinas que se acumulan en el organismo y le impiden realizar correctamente sus funciones.

El proceso de detoxificación elimina las toxinas que se acumulan en el organismo y que causan falta de energía e irregularidades en el organismo tras una serie de reacciones químicas. Éstas transforman las toxinas en sustancias menos tóxicas, de esta manera el organismo es capaz de eliminarlas.

limones

Los órganos que intervienen en una detoxificación son:

Sistema linfático: Cumple el primer paso de la detoxificación ya que transporta las toxinas a la circulación sanguínea para que los demás órganos cumplan sus funciones.

Hígado: Transforma las sustancias tóxicas en no tóxicas e hidrosolubles, pasan a los riñones y ellos se encargan de su expulsión.

Riñones: Eliminan las toxinas a través de la orina.

Pulmones: Ayudan a eliminar las sustancias las sustancias tóxicas volátiles, que son aquellas que se propagan en forma de vapor y generalmente son inhalados por las personas.

Intestinos: En ellos se encuentra la flora intestinal, que el principal miembro del sistema inmune. Es importante mantenerlo en buen estado ya que elimina las toxinas cuando las detecta.

Infusiones

Plantas que ayudan a detoxificar el organismo:

Cardo mariano: Depurador del organismo por excelencia. Repara lo efectos de las toxinas del alcohol en el hígado, normaliza los índices de azúcar en sangre y alivia el síndrome premenstrual. Ayuda a eliminar la retención de líquidos.

Alcachofa: Reduce el colesterol y la hipertensión, usada para el tratamiento del estreñimiento, la gota y el reuma.

Bardana: Mejora las digestiones y las afecciones urinarias y de la piel.

Fumaria: Mejora la flatulencia, las digestiones pesadas y los problemas de la piel.

Llantén: Depura las vías respiratorias, alivia úlceras y colitis.

Rábano negro: Regula las funciones del colon y los distintos trastornos del aparato digestivo.

Zarzaparrilla: Alivia las afecciones que se ven favorecidas por la eliminación de líquidos, como la cistitis o los edemas. Regula la hipertensión y tiene propiedades antiinflamatorias.

jugo-de-zanahoria

Manzana: Su pectina actúa como fibra soluble que regula el tránsito intestinal. Elimina el colesterol malo y actúa como anticatarral.

Las toxinas acumuladas son sustancias que el organismo no necesita y por eso manda señales cuando hay en exceso. Es necesario para el buen funcionamiento del organismo eliminarlas al menos una vez al año.

Al detoxificar el organismo no sólo mejora nuestra vitalidad, también equilibra los niveles de colesterol y azúcar en sangre, fortalece el sistema inmune, disminuye los dolores articulares, ayuda a reducir peso, al purificar la sangre mejora la circulación, frena el envejecimiento, equilibra el PH y reduce el riesgo de padecer enfermedades graves.

Fuente revistauh.es